Gracias, un poema de Abel Aparicio

GRACIAS

Ningún dolor me es ajeno

Dolores Núñez-  Brigadista internacional

Sentíais que algo os dolía
dentro de vuestras fronteras,
esas que trazan las lágrimas del dolor.

Visteis que sus palabras
bombardeaban el firmamento
y por las calles de un lugar lejano
yacían humilladas otras voces
que nunca entendieron
la bendición de la masacre.

Creísteis en la necesidad
de volar a un lugar
donde los días impregnados
del color de la pluralidad
fueron obligados a punta de pistola
a portar la bandera de la humillación.

No podíais creer que tantos niños
sólo leyesen pizarras vacías
sentados en los pupitres del escombro
mientras sus mentores
eran paseados por la senda del olvido.

Escuchasteis que el voto de la mujer
fue barrido y postrado
mientras las leyes se aprobaban
con brazos en alto
y con cadáveres desdibujando paisajes.

No comprendíais el golpe de las armas
y mucho menos
el odio de quien las portaba.

Por eso vinisteis,
por eso luchasteis,
por eso,
después de tanta amnesia
espero que vuestra figura
empiece a iluminar
los pasillos del reconocimiento.

ABEL APARICIO GONZÁLEZ